lunes, 28 de julio de 2008

Jardín Zen


Un maestro zen le pidió a su discípulo que limpiara el jardín del monasterio. El discípulo limpió el jardín y lo dejó en un estado impecable. El maestro no quedó satisfecho. Le mandó hacer de nuevo la limpieza una segunda vez, luego una tercera. Desalentado, el pobre discípulo se quejó:
- Pero maestro, no hay nada más que poner en orden, que limpiar en este jardín, ¡Todo está hecho!.
- Falta una cosa- respondió el maestro.
Sacudió un árbol y algunas hojas se desprendieron, tapizando el suelo.
- Ahora el jardín está perfecto- concluyó.

2 comentarios:

Afisionada dijo...

Hay un aspecto ordenado de lo mental que permite al intelecto trabajar dentro del orden y un aspecto desordenado que permite al inconsciente manifestarse. El orden perfecto sólo existe al lado del desorden. El orden total en un jardín mata el jardín.

El dedo y la luna. (A.Jodorowsky)

yak the ripper dijo...

parade - el futuro

a ver si la encuentras....todo un prodigio de las cosas raras rarísimas....tiene otra buena, estación espacial...y es murcianico...jajajaja

Twinkle, twinkle, twinkle, little star (Fredrika Stahl)