jueves, 20 de marzo de 2008

Lanzados del paraíso.

Quién preguntaría algo semejante cuando en verdad no importa.
Hay temas que no es necesario tocar, hay cuevas en las cuales no deberías meter tus narices y entonces el corazón no sería susceptible, ni cobarde, ni frágil.
Pero la vida es como es, no hay manera de hacerla rubia o tetona, no se puede alargar sus piernas ni los minutos que transcurren.
Y las fantasías son bellas pero cortas; los ojos deben abrirse en algún minuto; ser fuertes es la lucha. Fuimos lanzados del paraíso como delincuentes y no hay opción.Vivir en el minuto exacto es un privilegio.
Saberlo vivir es sabiduría.La vida, la vida, bla bla, ¿podemos definir lo que es intangible? Hoy hablo y mañana tal vez calle, tal vez sea un dulce goce existir o una, de por sí, mortal agonía. Como un niño me siento a llorar cuando sé que no puedo mover las piezas, cuando me doy cuenta de mi humildad, de esa pequeñez que no pude destruir en mí y entiendo que sólo puedo estar donde mi pies se encuentren medianamente seguros.
Al menos eso. Tratar de comprender, abrir los ojos y por fin... el silencio, o la espera, o la nada hasta que una mañana, vuelva a despertar.
Marcela

3 comentarios:

Striper dijo...

La Nada no existe siempre, siempre hay un algo.

Afisionada dijo...

Hay muchas cosas que no existen y nosotros mismos las creamos, a veces puedes estar rodeado de miles de personas y sentirte sólo, es algo parecido, la nada es como el silencio, absoluto no existe...pero la cabeza puede jugar muy malas pasadas...b7s

Pablo Ballesteros dijo...

si sentimos existimos
muy bien logrado

Twinkle, twinkle, twinkle, little star (Fredrika Stahl)